Esta práctica oriental propone experimentar el placer a través del uso de todos los sentidos y partes del cuerpo
Crear una conexión íntima y profunda, eso es en realidad el sexo tántrico. El tantra es una forma de desenvolverse en la vida, ya que pretende la plenitud por medio de la conexión con uno mismo y los demás.
¿Cómo se relaciona el tantra con el sexo?
La sexualidad solo es una pequeña rama de esta filosofía espiritual, pero que muchas veces solo se queda en una “idea occidentalizada” revestida con algo de sensualidad y erotismo. Por ejemplo, la unión entre hombre y mujer, que desde el punto de vista occidental es representado como algo erótico, desde el sentido tántrico se asimila como la unión entre lo femenino y lo masculino para alcanzar la plenitud como individuo.
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Principios del sexo tántrico
Definitivamente, la práctica del tantra relacionado a la sexualidad tiene la finalidad de intensificar la experiencia. Hay algunos principios enfocados a conseguir este objetivo:
- Aquí y ahora. Se debe estar consciente del presente y ser responsable de los encuentros íntimos, tanto en lo físico como en lo emocional. Para ello, es necesario concentrarse en “el aquí y ahora”, olvidar preocupaciones para enfocarse en las sensaciones que se experimentan en ese preciso momento. Dejar que los cinco sentidos se conecten para tener un conjunto único de placeres.
- No todo es coital. La filosofía tántrica propone emplear toda nuestra humanidad al momento de disfrutar de la sexualidad, algo que vaya más allá del coito. Experimentar y reconocer nuestro cuerpo y sus peculiares placeres.
- Amor propio: El sexo tántrico implica ser consciente de nuestras virtudes y defectos, amarnos tal cual somos, solo así, aunque suene trillado, podremos amar a los demás. Así crearemos un auténtico ambiente de confianza, seguridad y comprensión.
- Sin tabúes. El acto sexual es natural y se debe ser libre para ejercerlo. No caben prejuicios, tabúes y temores; hay que tener la disponibilidad de experimentar con libertad para alcanzar el placer.
- No crear falsas expectativas. Lograr el orgasmo no es un objetivo del sexo tántrico. De hecho, la única meta es disfrutar al máximo de la experiencia amatoria sin un cometido particular. No deben existir expectativas, de esta manera se olvidarán las exigencias comunes y las presiones colocadas en el “desempeño” óptimo.
- Comunicación. Se debe expresar en todo momento lo que se siente y piensa al tener una relación sexual. Ser claro en lo que gusta y desagrada. Esa misma apertura debe tener la pareja.
Cómo disfrutar del sexo tántrico
Al tener presente los principios de esta filosofía en la práctica sexual, se podrá disfrutar al máximo.
Hay que preparar el ambiente que se compartirá con la pareja, que sea cómodo para ambos. Se pueden incluir texturas, aromas y sabores que resulten gratos, pueden facilitar las cosas.
Controlar la respiración y tratar de sincronizarlo con el de la pareja. Obsérvala fíjamente a los ojos para establecer un vínculo, un lenguaje especial. Alternar ritmos durante la relación aumenta la excitación.
El sexo tántrico es una práctica sexual meditativa que estimula a las personas a enfocarse en las conexiones de mente y cuerpo. Esto puede llevar a experiencias sexuales satisfactorias y de mayor intimidad.
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Etiquetas: qué es, sexo, sexo tántrico, sexualidad, tantra
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Buenísimo el post. Un cordial saludo.