En el marco del Día Internacional de la Madre Tierra te platicamos sobre la importancia de Xochimilco, humedal en rescate.
“Los humedales son vitales para la supervivencia humana y uno de los entornos más productivos del mundo”, asegura la Convención sobre los Humedales. Y razones no faltan:
Estos ecosistemas son cuna de la diversidad biológica, fuente de agua externa y de recarga, hogar de innumerables especies.
Además, regalan y protegen de inundaciones, tormentas y huracanes; previenen deslaves, y equilibran el clima y el almacenamiento de carbono, reduciendo el calentamiento global.
Por estos motivos, a nivel nacional como internacional se ha llamado a llevar a cabo acciones que aseguren su conservación y rescate.
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¿Qué son los humedales?
La Convención sobre los Humedales o Convención Ramsar (por haberse celebrado en la ciudad iraní de Ramsar en 1971) considera humedales a:
Los pantanos, marismas, lagos, ríos, turberas, oasis, estuarios y deltas.
También considera sitios artificiales como embalses y salinas y zonas marinas próximas a las costas.
Con una profundidad que no exceda los seis metros, los cuales pueden incluir manglares, ciénagas y arrecifes de coral.
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Los humedales en México
México tiene actualmente 142 sitios designados como Humedales de Importancia Internacional, con una superficie de 8,657,057 hectáreas.
El problema es que la construcción de desarrollos urbanos y la contaminación estan provocando la pérdida de muchos.
Entre los más importantes para la biodiversidad en México se encuentra Xochimilco, humedal con más de 2650 hectáreas.
Xochimilco es el hogar de más de 400 especies de aves migratorias y residentes, como los pelícanos, las garzas, los cardenales o las gallaretas.
La Convención Ramsar, estableció la importancia de lograr que los humedales sean tratados como zonas para la conservación de la naturaleza.
También, como elementos clave dentro de la infraestructura urbana de gestión de los recursos hídricos.
Igualmente se consideró utilizar los humedales como sistemas de tratamiento de aguas residuales.
Lo anterior con el fin de mitigar los efectos de la sedimentación y contaminación en el medio urbano mediante la mejora del saneamiento.
Afortunadamente este llamado ha sido escuchado por el doctor Alejandro Federico Alva-Martínez, profesor del Departamento de Hidrobiología en la Unidad Iztapalapa de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
El investigador y su equipo se han dado a la tarea de trabajar en el rescate y rejuvenecimiento del ecosistema de Xochimilco.
La idea es recuperar y recrear las condiciones que existían en la época prehispánica.
Entonces las aguas eran dulces, claras y limpias, con una profundidad de 2.85 metros y con una gran diversidad de flora y fauna.
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Xochimilco, humedal en rescate
Rescatar un humedal es un gran reto, asegura el especialista, pues hay pocas investigaciones sobre cómo hacerlo.
Para lograr su cometido el primer paso consistió en procurar cuidar la calidad del agua de los contaminantes del medioambiente.
El segundo peldaño consistió en conservar e incorporar plantas acuáticas nativas y dominantes. Esta acción aumentó la cantidad de biodiversidad.
El investigador y su equipo basaron su desarrollo en un estudio publicado en 1884.
El documento refería la profundidad de los cuerpos de agua y las especies que ahí habitaban.
Y es que a principios del siglo pasado se decidió que el lago de Xochimilco abastecería de agua a la Ciudad de México.
Esta sobreexplotación del manto acuífero hizo desaparecer muchas chinampas y fue inevitable el desecamiento de su lago.
Explica el científico que los humedales que no se conservan de manera adecuada tienden a azolvarse y se secan.
Entonces se forman bosques con especies endémicas, como el paisaje que podemos vislumbrar hoy en Xochimilco.
En 1989 el Diario Oficial de la Federación decretó el plan de rescate ecológico de Xochimilco.
En marzo de 1990 comenzó la construcción de bordos delimitantes de la ciénaga chica y grande de la zona.
Para 1991 se inició la creación del Parque Ecológico de Xochimilco y el mercado de plantas.
Actualmente, asegura el investigador, ya pueden verse algunos beneficios de la rehabilitación de esta área, gracias al proyecto que terminó hace un año.
¿Has ido de paseo recientemente a Xochimilco? Platícanos si has observado los trabajos para su rescate.
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Etiquetas: Alejandro Federico Alva-Martínez, Día Internacional de la Madre Tierra, humedales, humedales en México, Parque Ecológico de Xochimilco, UAM, Xochimilco, Xochimilco humedal
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