Todos hemos escuchado hablar de estos especialistas, por eso te decimos qué es un geriatra y la importancia de saber cuándo solicitar su atención

De acuerdo con la definición de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se considera adulto mayor a una persona a partir de los 60 años en países en vías de desarrollo, y desde los 65 años en los países desarrollados.

En México, por lo tanto, se considera adulto mayor a una persona que tiene más de 60 años.

Las personas en este rango de edad requieren de especialistas enfocados en ellos.

Los geriatras son médicos generales o internistas con una especialización para atender a adultos mayores.

Ellos se encargan de prevenir y manejar enfermedades y síntomas vinculadas al envejecimiento.

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¿Geriatra o médico general?

“Los adultos mayores tienen un metabolismo diferente, por lo que no pueden asimilar o eliminar los medicamentos tan fácilmente”, explica Sara Vázquez Espinosa, gerontóloga.

Por lo anterior, explica, enfrentan complicaciones cuando tienen más de tres enfermedades crónicas que los obligan al uso simultáneo o excesivo de varios medicamentos.

Esta condición puede generar que no sepan cuáles fármacos realmente les benefician y cuáles les perjudican.

“Los médicos generales o especialistas van a atender la enfermedad. Los geriatras van a tener en cuenta los diversos padecimiento, el metabolismo propio de la edad, así como los efectos del medicamento”, puntualiza.

También, realizan valoraciones para detectar enfermedades o padecimientos que complican a otras enfermedades.

Asimismo, pueden indicar ejercicios motrices y cognitivos como coadyuvantes en la atención del padecimiento.

“Ellos trabajan en conjunto con los médicos especialistas. Si durante su evaluación consideran que se requiere una valoración o atención extra, canalizarán al paciente”, indica la la también voluntaria en Casa Hogar Marillac.

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¿Cuándo solicitar la atención de un geriatra?

De acuerdo con la American Geriatrics Society, después de los 65 años más del 30% de los adultos necesitan consultar a este tipo de médicos.

Sara Vázquez nos comparte algunos criterios básicos para considerar ver a un geriatra:

1. Edad

Si tienes entre 60 y 65 años vale la pena visitarlos para enfocar actividades y estrategias preventivas, y así lograr un envejecimiento exitoso.

2. Salud

Si se tiene más de tres enfermedades crónicas que llevan a tomar más de 5 medicamentos. Aquí la edad no es un referente.

3. Enfermedades vinculadas al envejecimiento 

Si se tiene uno o varios padecimientos como demencia, incontinencia urinaria, alteraciones de la marcha, osteoporosis, dolor de articulaciones, etc.

4. Menopausia y andropausia

Cuando se ha tenido la menopausia o se tienen síntomas propios de la andropausia.

5. Movilidad reducida 

Cuando se camina vacilante, cuesta trabajo desplazarse o se han tenido caídas.

6. Se está hospitalizado 

Si se encuentra hospitalizado por problemas de salud es ideal solicitar el apoyo de un geriatra.

Las investigaciones demuestran que esta atención mejora el pronóstico de recuperación tras el alta.

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¿Dónde puedo encontrar a este especialista?

El IMSS y el ISSSTE cuentan con geriatras.

Si se tiene más de 60 años o algunas de las condiciones mencionadas, lo ideal es solicitar al médico familiar lo canalice con un geriatra.

También si se está hospitalizado se puede solicitar el apoyo y la atención de un geriatra.

Existen también muchos otros que ofrecen terapia particular.

“Esto no significa que vas a dejar de ver a los médicos especialistas, más bien implica que trabajarán en conjunto”.

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¿Qué es un geriatra y qué es un gerontólogo?

“Los gerontólogos no son médicos, pero son especialistas en adultos mayores en materia de salud emocional, terapia ocupacional y física”.

Aclara que también pueden realizar una valoración integral del paciente y, en caso necesario, canalizarlo con un geriatra.

El gerontólogo puede atender áreas emocionales y otorgar terapia ocupacional y física para que el paciente conserve su calidad de vida.  

“Lo importante es que el adulto mayor sepa que cuenta con especialistas que le ayudarán a envejecer con calidad y la mayor independencia posible”, concluye Sara Vázquez Espinosa.

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