El virus del papiloma humano puede provocar cáncer cervicouterino, de ahí la importancia en la prevención 

El Virus del Papiloma Humano (VPH) es uno de los más comunes en todo el planeta. 

Por lo general se contagia a través del acto sexual, pero también se puede propagar de piel a piel, por medio de heridas pequeñas o cortadas que tienen contacto con verrugas u objetos que tuvieron contacto con éstas.

Es muy alto el porcentaje de personas sexualmente activas que tienen el VPH, del cual hay más de 200 cepas. 

Este virus es de bajo y alto riesgo. El primero provoca que salgan verrugas, especialmente en el área genital, pero también en la boca o en la garganta. 

El VPH de alto riesgo, cuando no se trata a tiempo, es causa de distintos tipos de cáncer.

El más común es el cervicouterino, pero igualmente provoca cáncer de ano, vulva, vagina, pene o de boca y garganta. 

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Revisiones periódicas para detectar el virus del papiloma humano

La prevención es clave para salvar vidas y no desarrollar ningún tipo de cáncer. 

Por esta razón es de suma importancia que todos se realicen controles médicos periódicos, por lo menos cada 6 meses y, en el caso de las mujeres, la prueba de Papanicolaou cada año. 

El Papanicolaou, también llamado citología vaginal, consiste en tomar una muestra para analizar las células y determinar si existen lesiones precancerosas o cáncer cervicouterino.

Este examen puede ser la diferencia entre la vida y la muerte, ya que es una de las formas más efectivas para detectar a tiempo el cáncer cervicouterino. 

Otro de los grandes avances para combatir el VPH es la vacuna, que actualmente se aplica a niñas y mujeres para ayudar a prevenir que se infecten de este virus que es muy contagioso.

Ahora también existen el tratamiento y los medios para que cada vez más mujeres sigan con su vida sanas o recuperadas.

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Meta mundial: desaparecer este cáncer

Con la prevención y la vacunación como principales armas, la Organización Mundial de la Salud (OMS) fijó a finales de 2020 el objetivo de terminar con el cáncer cervicouterino en todo el planeta.

Los pilares de la estrategia que lanzó la OMS son vacunación, detección y tratamiento. 

El organismo estima que si se aplican estos lineamientos, los nuevos casos de esta enfermedad podrían bajar más de 40% y evitar 5 millones de muertes relacionadas para el año 2050.

Para 2030, la OMS tiene tres objetivos establecidos:

• 90% de niñas vacunadas antes de cumplir 15 años con la vacuna contra el VPH.

• 70% de mujeres examinadas antes de los 35 y de nuevo antes de los 45 años mediante una prueba de alta precisión.

• 90% de las mujeres diagnosticadas con cáncer cervicouterino reciben tratamiento (90% con lesiones precancerosas y 90% con cáncer invasivo).

Una estrategia de este nivel hubiera sido impensable antes, ha dicho Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS.

“La eliminación de un cáncer habría parecido un sueño imposible hace un tiempo, pero ahora disponemos de herramientas con costos eficaces y basadas en datos científicos que pueden hacer realidad ese sueño.

“No obstante, solo podremos eliminar el cáncer del cuello uterino como problema de salud pública si aunamos el poder de las herramientas que tenemos con la determinación implacable de ampliar su uso a nivel mundial”, señaló.

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Factores de riesgo

• Visitar habitualmente lugares con alto nivel de contagio, como gimnasios, albercas o baños públicos.

• Tener relaciones sexuales sin protección.

• Piel dañada o seca, ya que fácilmente puede tener heridas.

• Un sistema inmunológico débil.

• Sangrados entre ciclos menstruales, tras el acto sexual o después de la menopausia.

• Secreción o dolor vaginal anormal.

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Etiquetas: cáncer cervicouterino, Papiloma Humano, Virus

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