¿Sabías que el célebre juego de mesa UNO cumple este año medio siglo de haber salido al mercado? Te contamos más de su historia

En cuanto alguien grita, ¡UNO!, comienza la verdadera batalla sobre la mesa. Todos deben hacer gala de sus habilidades con las cartas “Salto”, “Reversa”, “Come Dos” o, aún mejor, “Come Cuatro”. El único propósito: que nadie gane… excepto tú.

Este 2021, el célebre juego de cartas UNO cumple 50 años de haber sido creado por un barbero estadounidense de nombre Merle Robbins.

El juego consta de 108 cartas en el que colores (rojo, azul, amarillo y verde) y números (del 0 al 9) son protagonistas. También hay cartas especiales que permiten cambiar el sentido del juego, restringir el turno de un participante o decidir por un nuevo color para la partida.

Únicamente la versión Spin tiene 112 cartas e incluye una ruleta. 

Según Mattel (empresa propietaria desde 1992) vende actualmente 17 copias por minuto. Pero, así no fue en su surgimiento. 

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Historia del juego de mesa UNO

El UNO nació en la mesa de la cocina de la familia Robbins, en Reading, Ohio, tras varias discusiones al jugar al “ocho loco”, un juego parecido en el que se usa una baraja inglesa. 

De acuerdo con la página del Museo Nacional del Juego de Estados Unidos, el “ocho loco” sufre variaciones en cada familia. Por lo tanto, Merle dejó por escrito qué hacía cada carta para evitar que sucediera eso y empezó a crear cartas con nuevas funciones. 

¿El resultado? Un juego completamente nuevo que resultaba un éxito con todos los amigos, quienes les decían que debían comercializarlo. Pero, no encontraron a alguien que se animara a invertir en el UNO. La familia Robbins decidió pagar la impresión de 10 mil juegos que ellos mismos empaquetaron. 

Y comenzó la venta del UNO a tres dólares en la barbería de Merle.

Un juego de feria en feria

Merle Robbins contó en un reportaje para The Cincinnati Enquirer que el primer juego de UNO se lo vendió a su amigo Andrew Smith, propietario de una funeraria y compañero de partidas de cartas. Él se convertiría en el principal promotor del juego.

“Cada semana, Andy me llamaba para pedirme dos docenas de juegos o más. Cuando iba a convenciones o ferias, me pedía de cuatro a seis docenas”, contó. 

El juego comenzó a popularizarse de boca en boca y a ser conocido fuera de la ciudad de Reading gracias a los tours funerarios de Andrew Smith. Un año después de su lanzamiento, en 1972, Robert Tezak, el propietario de otra funeraria decidió comprarle el juego a los Robbins por 50 mil dólares y 10 céntimos de dólar por cada UNO vendido. 

A la familia Robbins le había costado producirlo 8 mil dólares, así que el mismo día que lo vendieron, Merle vendió también su barbería y se jubiló. Tenía 60 años. 

Tezak fundó la empresa Games Inc. para distribuir el juego y para 1980 ya había vendido más de 15 millones de copias en Estados Unidos, superando a Monopoly y Scrabble. 

¿Quién es el dueño actual del UNO?

Dos años después, Mattel compró a esa compañía y el juego UNO ya se vendía en más de 30 países y se imprimía en 18 idiomas. Así que su plan de expansión se dirigió en crear distintas versiones: de lujo, de corazones, con personajes de caricaturas, impermeables, electrónicas…

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Actualmente hay más de cien versiones de UNO y se producen mil millones de cartas anualmente.

Ete año, Mattel publicó una edición especial por el 50 aniversario, se distingue por un diseño de cartas con fondo negro y una nueva regla.

¿Ya se te antojó jugar una partida? Ahora, dinos qué color eliges… 

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Etiquetas: historia, juego de mesa, UNO

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