La industria de la cosmética y de los perfumes ofrece productos con feromonas para la atracción sexual, pero ¿qué tan real es este efecto?
“Las feromonas son sustancias químicas que actúan como señales para atraer al otro sexo.
“El ser humano, al igual que otros animales, segrega feromonas de manera natural”, explica el doctor César Luis Montiel del Instituto de investigaciones forestales de la Universidad Veracruzana.
Fue en 1959 cuando los doctores Luscher y Karlson denominaron a estas sustancias feromonas, que provienen del griego “llevar a la excitación”.
“Las primeras investigaciones se realizaron en insectos”, explica el especialista en ecología química, diversidad y comportamiento de los insectos en los ecosistemas.
Fue el doctor J. H. Fabre quien detectó la existencia y el uso de feromonas con fines reproductivos.
El descubrimiento ocurrió tras observar como a su casa llegó una mariposa hembra a la que siguieron varios machos.
Reveló que las hembras que están listas para la reproducción emiten un olor, a través de una glándula, que llena la atmósfera circundante.
Los machos detectan este aroma a través de las antenas muy especializadas que tienen señores con los que detectan las feromonas.
El conocimiento de las feromonas en el reino animal, en específico en el caso de los insectos, ha servido por ejemplo, para la producción de miel.
Estas sustancias se utilizan para sustituir a la reina en las nuevas colmenas o para la cría de nuevas reinas.
Perfumes con feromonas para la atracción sexual
Este conocimiento evidentemente ha llegado a manos de la industria de la cosmética y de perfumes que asegura haber logrado sintetizar feromonas.
Éstas son colocadas en algunas esencias o perfumes con la finalidad de atraer individuos con fines sexuales.
“Los seres humanos hemos perdido la facultad de percibir las feromonas emitidas por nuestra propia especie, o no la hemos desarrollado”, puntualiza el doctor Montiel en su artículo ¿Qué son las feromonas?
Agrega Alexa Castillo, maestra en Sexualidad desde la perspectiva de género, que en los seres humanos la atracción sexual va más allá de un perfume.
Intervienen, en cambio, factores como nuestra historia, educación, orientación sexual, intereses, deseos en específico, etc.
Incluso el aroma de perfumes con feromonas, puede resultar repulsivo, pues no hay que olvidar que el gusto se rompe en géneros.
“Las feromonas como atractivo sexual es un mito”, asegura la directora de Fundación Mandala.
Sin embargo, una actitud segura y empoderada, sí puede resultar muy atractiva.
Las mujeres al ponerse perfume (con feromonas) adquieren una seguridad que sí las hace atractivas, algo así como “efecto placebo”.
Por lo anterior, la especialista enfatiza que lo más importante es que nuestra seguridad sexual no dependa de ninguna “sustancia”.
La seguridad propia, asegura, debe provenir de una aceptación y actitud amorosa hacia nosotros mismos.
Ahora que ya sabes que los perfumes con feromonas para la atracción sexual son un mito, te invitamos a que tu personalidad sea el verdadero imán.
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Etiquetas: atracción sexual, Feromonas, perfumes con feromonas
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